Patricia Poleo y Gianfranco Napolitano
fueron sentenciados por difamación e intento de extorsión en la Corte del
Distrito Sur de la Florida, con sede en la ciudad de Miami, Estados Unidos.
Poleo y Napolitano emprendieron una
sostenida campaña mediática difamatoria de la cual Gianfranco Rondón fue
víctima el año pasado. El litigio se remonta a una campaña articulada por el
empresario venezolano Gianfranco Napolitano, a través de la periodista Poleo y
por la red de medios privados que poseen en la ciudad de Miami, en contra del
grupo de empresas que lidera Rondón. En esa ocasión pretendieron, al igual que
hicieron con éxito con otros empresarios venezolanos que laboran entre Estados
Unidos y Venezuela, extorsionar a Rondón, solicitándole una gran cantidad de
dólares bajo amenaza de granjearle enemistades con la población venezolana
residente en Miami e incluso con sectores vinculados al Gobierno venezolano, a
través de la publicación de notas difamatorias en medios de comunicación de
circulación nacional y regional dentro de los Estados Unidos.
Rondón participa, junto a otros
empresarios venezolanos, en la gestión sanitaria y ambiental proveyendo insumos
y maquinarias a gobiernos regionales y municipales en Venezuela. El grupo
empresarial también posee una Clínica privada, acciones en medios de
comunicación y otros comercios asociados a servicios generales.
En el proceso judicial el empresario
de RG Goup CA desmintió, con pruebas técnicas y datos filiatorios, las falsas
acusaciones emitidas por Poleo y Napolitano en su intento por difamarlo. De
esta manera, Rondón ha sido reivindicado y protegido por la Corte del Distrito
Sur de la Florida en una sentencia que restablece su “honorabilidad e
independencia del demandante así como su participación en el portal de noticias
por internet Doral News Online”, según reza la nota de prensa en cuestión.
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